La red Caronte.

Hoy vengo a recomendaros un libro diferente a los anteriores, me alejo de la romántica para irme a los crímenes descontrolados de un asesino en serie. Es lo que tiene ser una ávida lectora, que cualquier género que despierte mi interés es susceptible de engancharme.

Gema Herrero Virto es la autora de la obra que os voy a recomendar a continuación, llevo coincidiendo con ella en los grupos de facebook varios meses y como siempre me va llamando la atención lo que cuenta y cómo lo cuenta, hasta que decidí lanzarme a leerla después de un tiempo de sequía lectora.

No sabía lo que me iba a encontrar, pero después de las primeras páginas el libro me absorbió, no podía dejarlo, tenía que descubrir quién era el asesino detrás de aquellos horribles crímenes. Las escenas se sucedían, la investigación policial seguía su curso y con cada página estaba más confusa, lo que es realmente estupendo porque eso te mantiene en vilo durante todo el relato.

Hacía el final, ya me olía que algo no estaba bien, es lo que tiene ver tanto Mentes Criminales, algo no cuadraba, pero a pesar de ello la intriga no disminuyó, necesitaba saber cómo acababa y qué pasaba con el asesino.

Toda la trama va de la mano de Carlos Vega, un inspector de homicidios con sus propios demonios internos, Natalia Egaña, una forense que no tiene muy claro que serlo sea su camino o al menos esa es mi impresión durante buena parte del libro y Gus, un joven informático que le da un aire de ligereza a ciertas escenas haciendo que podamos relajarnos un poco aunque ¿quién podría con un loco suelto matando a adolescentes?

Una historia bien hilada, en la que no debes perderte ni un párrafo porque en cada uno de ellos hay cosas importantes, sobre todo en los últimos capítulos. Un libro que me ha hecho desconectar del mundanal ruido trasportándome a los bellos parajes de Vizcaya, aunque no sé si me atrevería a pasear por ellos después de todo lo «ocurrido» allí.

Aunque lo más aterrador de esta historia, yendo un poco más allá, y que me preocupa, es que lo que ocurre en el libro puede llegar a ser posible, el ser humano es capaz de lo mejor y de lo peor. Hoy en día hay demasiada soledad, demasiado dolor y nos refugiamos tras la pantalla sin saber quién hay al otro lado y desde la vulnerabilidad podemos llegar a confiar en quien no lo merece dando pie a lo que sucede en el libro.

Una historia policíaca, pero con un trasfondo que al analizarlo te deja un regusto amargo en el paladar, lo que sin duda es estupendo. Al fin y al cabo busco lecturas que transmitan algo, que te dejen pensando, que te hagan reflexionar o te rocen la piel provocándote un escalofrió. Y esta lo ha conseguido.

Os invito a leerlo, a descubrir por vosotros mismos a una autora que no habría que perder de vista. Os dejo la sinopsis, breve y concisa, pero que no os dejará indiferentes.

Sinopsis.

¿Quieres unirte al equipo de investigación que tratará de atrapar a Caronte, el asesino en serie que enamora a adolescentes tímidas y solitarias a través de Internet?

Los cadáveres brutalmente mutilados de varias adolescentes aparecen abandonados en parajes apartados de Vizcaya. No hay pistas sobre el asesino, nadie sabe nada del misterioso asaltante y lo único que tienen en común todas las víctimas es que son jóvenes solitarias.
La investigación lleva a la joven forense Natalia Egaña y al inspector de homicidios Carlos Vega a descubrir que el asesino contacta con sus víctimas a través de Internet. Usando el sobrenombre de Caronte se acerca poco a poco a ellas, descubre sus secretos más íntimos y las enamora hasta conseguir una cita que será fatal para ellas.

La encontráis en Amazon justo aquí: La red Caronte

Y si os gusta, os atrapa y os hace desear leer más, Gema nos obsequia con una segunda historia llamada Suicidios inducidos, con el mismo equipo de investigación y a la que ya quiero echarle el guante.

Bea Melworren.